Entrevista a Carles Brasó-Broggi, autor de Private Networks in the Chinese Textile Industry. Opening Up Before the Reform

foto Carles BrasoCon motivo de la publicación de Private Networks in the Chinese Textile Industry. Opening Up Before the Reform (Palgrave McMillan, 2015), su autor, Carles Brasó-Broggi, ha respondido a nuestras preguntas. Carles es doctor en Historia por la Universitat Pompeu Fabra y colaborador de nuestro programa, en el cual ha impartido docencia en asignaturas de historia de Asia Oriental y comercio en China.

Carles, enhorabuena por la publicación y gracias por atender a nuestras preguntas. ¿Cómo surgió el proyecto de este libro?

Yo llevaba varios años investigando las empresas textiles creadas en Shanghai en los años veinte y treinta del siglo XX pero era consciente que el maoísmo constituía una barrera infranqueable tras la cual, ninguna empresa privada había sobrevivido. Así pues mi investigación acababa forzosamente en los años cincuenta, sin solución de continuidad. Sin embargo, cuando fui a Hong Kong en junio del 2013, descubrí que, en realidad, una parte de estas empresas se habían trasladado a Hong Kong donde habían continuado operando en la época más dura de la Guerra Fría. Descubrí conexiones, intersticios y contactos que se produjeron entre Hong Kong y la República Popular de China que habían pasado desapercibidos y que fueron determinantes en los primeros proyectos de inversión privada que se aceptaron al inicio de la reforma económica, en el año 1979. Entonces fui consciente de que tenía un libro en potencia. El profesor Lee Pui-tak, de la Hong Kong University (HKU), me sugirió que escribiera un libro y al mismo tiempo contacté con la editora de Palgrave Macmillan, Rachel Krauze que se mostró ilusionada con el proyecto, que se concretó un año después de mi primer viaje de investigación a Hong Kong.

9781137494054¿Podrías presentar brevemente el argumento central del libro y cómo lo desarrollas?

El libro es una contribución al debate sobre la industrialización en China. En mi caso, no me interesa tanto discutir por qué China no se industrializó antes (un tema ya muy trabajado en el campo de la historia económica) sino cómo fueron los intentos de industrialización anteriores a 1979 y por qué no fructificaron. Mi tesis intenta rebatir los argumentos institucionalistas hegemónicos, donde se intenta buscar un factor institucional (sea cultural-religioso, político-estatal, o bien económico-empresarial) para explicar la debilidad de los procesos de modernización e industrialización en China. Por el contrario, mi argumento se centra en elementos comerciales y muestra, mediante los documentos privados de estas empresas (juntas de accionistas, consejos delegados, directores de fábrica, etc.), cómo la fragmentación del mercado chino fue el factor fundamental que impidió que la industria se expandiera. La industrialización en China tuvo éxito solamente en un área muy restringida, en los alrededores de Shanghai, que es donde había mercado para los bienes industriales y se expandió hacia fuera, importando maquinaria y materias primas y exportando productos acabados, sobre todo en los años treinta y cuarenta del siglo XX. Esta circunstancia hizo que la región de Shanghai se desarrollara muy rápidamente mientras el resto del país permanecía en el sector agrícola y sin contacto con la riqueza que generaba la industria. Este modus operandi de las empresas chinas se trasladó a Hong Kong y, finalmente, regresó a China al inicio de las reformas.

¿Cuáles crees que son las principales aportaciones del libro?

Creo que el libro realiza dos aportaciones históricas novedosas. En primer lugar, prueba que las redes comerciales privadas de la época republicana no desaparecieron con el maoísmo sino que algunas sobrevivieron en Hong Kong. Desgraciadamente, hay poco contacto entre los estudios de la China republicana, de la época maoísta, del mundo de la diáspora y de la reforma económica, como si las fronteras de la Guerra Fría hubieran dividido también el mundo académico. Este libro intenta cruzar estas barreras tal y como queda reflejado en su estructura: los primeros capítulos suceden en Shanghai y la zona del delta del Yangzi en la época republicana hasta los inicios del maoísmo, después la acción se traslada a Hong Kong y el último capítulo explica el deshielo y la aproximación progresiva de las empresas de Hong Kong a China continental durante los años 1970. En segundo lugar, el libro muestra cómo el modelo de desarrollo económico basado en la importación de tecnología y exportación de productos acabados, tenía unas raíces históricas que no habían sido estudiadas antes, en concreto en la experiencia de muchas empresas privadas. Comprendiendo estas lógicas empresariales, el libro ofrece una explicación de los orígenes de la reforma que va más allá de la noción de “milagro”, que tantas veces acompaña la literatura académica de las reformas.

A lo largo de la investigación realizaste un extenso trabajo de archivo, ¿qué aspectos destacarías de este proceso?

En conjunto, el trabajo de archivo en China ha sido muy satisfactorio. En Shanghai estuve afiliado a la Academia de Ciencias Sociales de Shanghai (SASS) donde tuve todas las facilidades para consultar sus archivos (en particular el archivo de historia de la empresa privada de China del SASS) y, sobre todo, el Archivo Municipal de Shanghai, donde está el grueso del material empresarial que he utilizado. También me abrieron las puertas en otros archivos de Shanghai y en los archivos de Changzhou, Wuxi, Ningbo, Nanjing y Hong Kong. Una cosa curiosa es que los materiales empresariales abundan en aquellas ciudades donde se ha producido una transición socialista (y donde estos materiales, tras ser requisados, han sido puestos a disposición de los investigadores) mientras que son muy difíciles de encontrar en las ciudades como Hong Kong, donde esta transición no se ha producido. Así pues las investigaciones sobre historia económica y empresarial de Hong Kong tienden a apoyarse en fuentes familiares mientras que las realizadas en la República Popular de China son ricas en documentos privados de las empresas. Así pues, el lugar donde uno hace investigación (y los archivos a los que tiene acceso) influye mucho en la investigación misma.

¿Cómo se relaciona lo que exploras en el libro con la situación actual de la economía china?

Actualmente, China se encuentra con el dilema de tener que cambiar su modelo económico, ya que el país (sobre todo las regiones de la costa) ya no resulta atractivo por sus bajos costes de producción. Por otro lado, la crisis económica mundial ha debilitado la capacidad exportadora de su industria y, por consiguiente, los crecimientos de dos dígitos, característicos de la época de las reformas, se han esfumado. Por otro lado, China es el mayor país que ha experimentado un proceso de industrialización y con ello ha conseguido sacar a millones de personas de la pobreza pero pagando un alto coste, como demuestran las recientes crisis medioambientales y de seguridad alimentaria. Así pues, existe un cierto consenso en que la época de las reformas (tal y como fueron ideadas por Deng Xiaoping) ha terminado. Sin embargo, quedan todavía muchas preguntas sobre estas reformas. Así pues, el libro intenta dilucidar cómo se empezó a construir este modelo de crecimiento que hoy está agotando su recorrido.