Carles Prado-Fonts
Profesor del Máster Universitario de Estudios de China y Japón

El dato llama la atención. Naturalmente, se ha interpretado como una oportunidad perdida para la economía española, que no aprovecha las facilidades logísticas para exportar a China–a pesar de las dificultades que, por ejemplo, se mencionan en esta noticia.
No obstante, la imagen de un tren vacío de regreso a China es quizás la metáfora de una globalización limitada, incompleta, restringida sólo a determinados ámbitos, direcciones e intereses. En la esfera cultural, aunque el sentido es el inverso (es Occidente quien exporta vagones y vagones y vagones repletos de cine, literatura y filosofía a China–y, de hecho, a todas partes del planeta), el tren sigue regresando de vacío en el trayecto de vuelta, ya que apenas nos interesamos verdaderamente por cualquier cultura que consideramos periférica.
Estamos globalizados, pero a medio gas, y cada vagón vacío es una oportunidad perdida…
[Fuente imagen: Julián Rojas]